Pensá en la escena: una fiesta con la familia. Las risas inundan el ambiente. Y en el centro de todo, el aroma inconfundible que lo domina todo: un espectacular pernil perfectamente cocido, con ese cuerito crujiente y una carne tiernísima que se corta con mirarla. Esta imagen es casi un https://fridae951fwa7.blogdomago.com/profile