Es importante destacar que estos conceptos no son meramente teóricos, sino que tienen aplicaciones prácticas directas. Por ejemplo, entender la diferencia entre un peligro y un aventura nos permite evaluar correctamente las situaciones potencialmente dañinas y tomar las medidas adecuadas. Para permitir a la fundación el expansión de sus actividades, https://fatallisto.com/story9079321/gesti%C3%B3n-de-riesgos-para-tontos